Una vez escribí una historia acerca de un individuo que es invitado a un lugar aparentemente abandonado en una vieja calle de la zona uno de la ciudad, donde se reunía un grupo de gente para hacer un ritual que resultaría en un viaje interdimensional. Al principio el tipo tiene dudas e incredulidad pero termina completamente enfrascado en el asunto.
Esa historia la publiqué en un foro interno de mi lugar de trabajo, obedeciendo a mi cerebro que parece engendrar ideas e historias (se me acaba de ocurrir algo acerca de un cerebro embarazado). El foro era visto por el grupo de compañeros donde, como en cualquier lugar de trabajo, cada quien cree en lo que quiere.
Uno de los comentarios que puso una señora fue poco más o menos "Así es como el diablo gana seguidores, hay que tener cuidado con las juntas porque pueden ser malas influencias..." y otras cosas por el estilo.
Lo que pensé que sería un humilde homenaje a Lovecraft terminó siendo un debate acerca de cómo la gente se termina creyendo las historias que a veces la gente cuenta aunque sea un simple cuento (y con toda la mala intención).
¿Han escuchado hablar de las creepypastas? Esas historias completamente falsas que la gente se cree. Por ejemplo, cuando era niño miraba Los Pitufos, tenía juguetes, y hasta un juego de sábanas de los suspiritos azules perseguidos por Gárgamel. Pues un día en la escuela alguien resultó con que los inocentes pitufitos en realidad eran satánicos y que los juguetes y las figuritas relacionadas a ellos cobraban vida por la noche y te iban a acuchillar, a morder o saber ni cuántas cosas. Yo me preguntaba si los pitufos que estaban jugando pelota en mi sábana iban a tirarme la pelota en la boca mientras roncaba para asfixiarme.
Con el advenimiento del internet se han generalizado las dichosas creepypastas, algo así como la hojita que dejaban bajo la puerta de tu casa con una ficha de a 5 pegada diciendo que la cadena tenía que darle la vuelta al mundo y si no la repartías te iba a cagar un zope (hey, esperen un momento...). Y por más que uno trate de desmentir toda la sarta de cosas que la gente comparte he decidido mejor unirme al grupo y crear mi propia creepypasta.
¿Qué tan difícil puede ser? Solo tenés que tomar algo aparentemente inocente como la hello kitty, fijarte en alguna particularidad como que no tiene boca y luego inventarte que la creadora del juguetito tenía una hija que padeció cáncer en la boca y que le vendió el alma al chamuco para salvarle la vida para luego en agradecimiento crear la gatita y de paso hacer algunos milloncitos con la mercadotecnia. Fácil ¿verdad?
Estaba pesando en algo como las caricaturas que veo con mi hijo, por ejemplo, Timmy Turner de Los Padrinos Mágicos es un niño que vive en un terreno baldío abandonado por sus padres y posiblemente se volvió loco y alucina con sus padrinitos que le dan los regalos que sus padres inexistentes no le dan. Vicky la niñera es su hermana que trata de hacerlo salir de sus alucinaciones y que vuelva a la vida real, pero él la ha visualizado como la malvada que trata de sacarlo de un mundo que él ha creado para sentirse protegido.
Las japonesas son fáciles en realidad, siempre tienen elementos sobrenaturales y algunas de hecho hasta juegan con la "mitología occidental" para crear ficciones basadas en cosas que para nosotros son dogma, así es fácil convertir cualquier caricatura japonesa en creepypasta.
También están las teorías de conspiración, como la que se creyó una página web de noticias donde decían que los jugadores del mundial estaban dominados por los illuminati porque en algunas fotos se mostraban triángulos, pero para esa hay que ser muy inocente para creerla.
Aunque, hablando del fútbol, ¿Se han dado cuenta que muchas fotos de sus caras cuando celebran un gol aparecen desencajados, con los ojos desorbitados, los músculos tensos, con el pelo parado como pollos desplumados? A lo mejor es algún tipo de posesión que se andan echando, creo que ya tengo tema para mi historia creepy muajajaja.
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